APLICACIONES
TECNOLÓGICAS
¿Realmente facilita, o genera un grado de dificultad adicional?
«La aplicación tecnológica sobre la vida cotidiana nos ha dado la oportunidad de facilitar nuestra vida brindando ayudas prácticas, ágiles y al alcance de la mano».
¿Realmente facilita o genera un grado de dificultad adicional?
La aplicación de las tecnologías en la cartografía ha permitido facilitar el acceso a la información geográfica de una ubicación remota sin tener la necesidad de trasladarse para conocer una estructura básica que nos brinde información relevante a tomar, para determinar una ubicación en un lugar. Esto, ha hecho que a la hora de afrontar una situación de desorientación geográfica podamos recurrir a ciertas tecnologías para recobrar el sentido de orientación y dirigirnos a un lugar determinado.
La lectura, construcción, acceso e interpretación de mapas era una disciplina realizada por unos pocos, los cuales contaban con un conocimiento previo que los facultaba para estas tareas. Ell acceso a las tecnologías acompañado de la información cartográfica, ha permitido que la industria en la actualidad brinde la opción de acceder a este tipo de servicios por demanda a través de portales de internet o dispositivos móviles.
El nivel de acceso a la información con la cual contamos actualmente, ha provocado mayor accesibilidad a contenidos y publicaciones, lo que ha generado altas expectativas y dificultad en la abstracción de información relevante según el receptor de los mensajes; un ejemplo claro de esto es el acceso a cartas cartográficas y a los Sistemas de Posicionamiento Global (GPS).
El uso del GPS en las actividades diarias de una persona con acceso a la tecnología se basa en la optimización de tiempo y del recurso financiero para facilitar la orientación y ubicación de la misma para evitar incumplimientos, retrasos o una mala imagen en su entorno social y laboral.
Información
Cartográfica
Si bien, las tecnologías facilitan el acceso a la información, esto no significa que un individuo cuente con la capacidad de manejo y uso de la misma. A pesar de que en el mercado se encuentren múltiples aplicaciones que ofrecen información cartográfica de manera amigable y de fácil uso, en ocasiones parece no ser suficiente debido a que el usuario (transeúnte) no tiene conocimiento de cómo emplear esta información o toma un tiempo de adaptación considerable para que no haya una afectación a su diario vivir.
Aunque la mayoría de los dispositivos de comunicación en la actualidad, cuentan con un sistema de posicionamiento incorporado, esto no garantiza la precisión en la ubicación y orientación del individuo; esto se ha hecho evidente en los sistemas destinados a la movilidad, ya que las aplicaciones usadas para determinar rutas de un destino “A” a un destino “B” no toman en consideración variables de carácter social tal como al seguridad y/o nivel de peligro al transitar por determinadas zonas, por lo cual, durante el uso de estos sistemas los cambios durante un trayecto no dependen ni tienen en cuenta de la percepción de seguridad del conductor o pasajero.
En caso particular, Bogotá es una ciudad que por su extensión y comportamiento cartográfico permite que los sistemas de movilidad generen más de una ruta para movilizarse de un punto “A” a un punto “B” de la ciudad. Debido a que estas aplicaciones no cuentan con factores sociales parametrizados, en ciertas ocasiones se prioriza el factor de disminución de tiempo y kilómetros recorridos haciendo que se recorran zonas consideradas como inseguras.
Entonces hay que considerar que al momento de tomar decisiones respecto a la movilidad, una persona pueda evaluar, no solo la rapidez del desplazamiento si no también la percepción de seguridad del entorno según la elección de vías; factor que se vuelve fundamental en los problemas de movilidad y afectación en el tiempo de desplazamiento, buscando minimizar la ocurrencia de situaciones de riesgo, relegando el sistema y sus algoritmos de programación de rutas, volviendo a la orientación basada en la experiencia y comodidad del usuario.
La relegación de las tecnologías en temas de movilidad por parte de los usuarios finales es una constante en la actualidad, basados en el valor y el temor de la ocurrencia de situaciones de peligro que afectan nuestra integridad personal, lo que incide en la complejidad que le damos al uso de ciertas aplicaciones de movilidad como #Movit, #Waze y #GoogleMaps, tomando rutas alternativas durante su uso por considerar que sus opciones no son convenientes y pueden generar situaciones de peligro.